Y así fue cómo, gustosa, acepté una invitación a presentarme en el campus Guadalupe de la Universidad Tecmilenio y que hoy agarré mi pato-pollo y mis libros, me tomé una selfie para instagram y me subí a un camión de la ruta 214, esperando nada más que un tranquilo viaje de media hora...
Lo que yo no sabía es que hay varios caminos para esa ruta y la que yo usé NO pasaba frente a la escuela. Para cuando noté que ya me había pasado la dirección, estaba como a cinco paradas más lejos de la que me correspondía. Pero, ¡meh!, no es como si fuera la primera vez que me toca caminar más de lo planeado en mis sandalias Demonia ╮(─▽─)╭ A estas alturas, mis pies ya están acostumbrados ᕙ(⇀‸↼‶)ᕗ
Bueno... total que para cuando llegué a la escuela me topé con un campus muy bonito, muy amplio y con una brisa por demás deliciosa. El evento al que yo me dirigía era la Semana Cultural y Literaria que las autoridades de la Biblioteca habían organizado para el alumnado. Tengo entendido que los chicos pudieron ser parte de rallys literarios y otras actividades parecidas. Yo alcancé a ver (y a envidiar) el aula que habían adaptado para una feria del libro.
Apenas encontré a las encargadas del evento, me dirigí al salón donde daría una conferencia sobre mis libros y mi vida como escritora independiente... ¡Cuando la magia ocurrió!
Resulta que algunos de los muchachos ya sabían de mi existencia y varios tuvieron la oportunidad de verme en mi cosplay de Wadanohara durante la pasada Animex :D
Viendo que mi público sería pura chaviza conocedora de anime, mi ánimo fue todavía mejor y no tuve que sobre-esforzarme para hablar como un ser humano normal (que no lo soy y todos los sabemos).
La verdad es que la hora que me dieron para hablar se fue en menos de cinco minutos. Los chicos hacían preguntas interesantes y se reían conmigo de mis respuestas y ocurrencias. Hubo quien se animó a preguntarme cosas más bien enfocadas a las historias que ellos mismos están escribiendo y hasta quien me compró libros :'3 Con decir que mis separadores de Daciel se agotaron podrán hacerse una idea de lo participativos que fueron los muchachos.
Sé que en las fotos se ven serios, pero no se dejen engañar~
Honestamente, creo que una de mis partes favoritas fue haberme encontrado gente que me recuerda (y que esa misma gente haya podido comprar en esta ocasión los libros que no pudieron comprar durante la convención). Que varios de los que acudieron se quedaran a dialogar sobre sus gustos, sus experiencias y sus amistades otakus hizo que olvidara el dolor que sentía en mis rodillas gracias a la larga caminata bajo el sol y a lo frío del aire acondicionado del salón de conferencias, hahaha.
Me retiré con un muy buen sabor de boca de la escuela. Incluso había gente que buscaba despedirse de mí en la parada de camión... ¡Creo que nunca me había sentido tan bien acogida en una universidad! Aunque he de confesarles algo: nadie se tomó fotos conmigo, ¡pero sí con el pato-pollo! Hahahah. Qué bueno que les guste mi mochila, lectores bellos :'3
Esta corta pero satisfactoria experiencia me ayuda a recordar lo hermoso de mi trabajo. Sí, me enfermo feo de vez en cuando y mi cuerpo me duele casi todo el tiempo, pero, al final, siempre todo vale la pena. Son momentos como estos, en los que la gente se acerca y me saluda y no tarda en buscarme en mis redes para continuar nuestras pláticas en que me olvido de todo lo demás.
Hay gente preguntando que cuál será mi próximo evento... Siendo honesta, yo tampoco sé x'D Pero sé que les avisaré con tiempo y que prepararé lo mejor de mi material para los asistentes.
Espero que nunca dejen de invitarme a estos eventos y que nunca deje de encontrarme públicos como el de hoy.
Y gracias a Alberto Rebolledo por tomarme algunas fotos :)
¡Nos seguimos leyendo, lectores hermosos! ✩°｡⋆⸜(ू˙꒳˙ )
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